Pudimos sentir la Presencia del Espíritu Santo en la celebración.
En la primera lectura de hoy, escuchamos que “todos los discípulos estaban reunidos en el mismo lugar.” Este mismo lugar era conocido en latín como el cenáculo. El origen de la palabra cenáculo es del latín cena, que significa comida o cena.
En el techo de nuestra iglesia hay una interpretación artística del cenáculo, donde Jesús tuvo su última cena. La primera lectura de hoy nos dice que en el cenáculo los discípulos recibieron el don del Espíritu Santo en el día de Pentecostés. Observe las lenguas de fuego que descansan sobre la cabeza de cada figura. En el Antiguo Testamento había una sola palabra (ruach) para aire, viento y espíritu. Así que el gran viento era un símbolo del Espíritu. Lo especial de esta pintura es que muestra a Santa Lucía siendo introducida en el cenáculo.
Santa Lucía fue martirizada en su ciudad natal de Siracusa (Sicilia) el 13 de diciembre del año 304, aproximadamente 270 años después de la muerte de Jesús. Esta presentación artística en la cúpula de nuestra iglesia nos ayuda a comprender que hoy es la introducción de estos 8 comulgantes al cenáculo, aproximadamente 2000 mil años después de la muerte de Jesús. Jesús dijo: "Yo soy el pan vivo bajado del cielo; el que come de este pan vivirá para siempre.” Escuchar estas palabras de Jesús y ver la pintura de la cúpula nos muestra que, aunque moriremos, como murió Santa Lucía, nuestra vida no se acaba, sino que se transforma. Así como el pan se transforma en el don vivo de Jesucristo.
Nadie puede llamar a Jesús "Señor", escribe San Pablo, si no está bajo la acción del Espíritu Santo. Siguiendo esta intuición de San Pablo en la segunda lectura, podemos decir: nadie que coma este pan puede decir que "vivirá para siempre", a menos que esté inspirado por el Espíritu Santo.
El Espíritu Santo me fue dado en mi Bautismo. El Espíritu Santo me fue dado en mi Confirmación. El Espíritu Santo me fue dado en mi ordenación al sacerdocio. En el evangelio de hoy escuchamos: “Sopló sobre ellos y dijo: 'Reciban el Espíritu Santo'.